AVISO: la información contenida en este artículo es genérica y orientativa, en ningún caso sustituye el criterio de su especialista en traumatología.
Diagnóstico y programación de la cirugía del dedo en resorte o dedo en gatillo mano
En esta patología el diagnóstico es puramente clínico, es decir, no requiere confirmación a través de exámenes auxiliares, la mayoría de pacientes llegan a consulta con el dedo enganchado, siéndoles imposible extenderlo.
Como en la mayoría de patologías, si el dolor y la falta de movilidad que padece el paciente le incapacita en su día a día, se debe operar, por lo que se programa la cirugía.
Esta cirugía generalmente se realiza con anestesia local, si bien, también es posible realizarla con un bloqueo de todo el miembro superior para lo que se pedirían las pruebas preoperatorias standard en estos casos: radiografía de tórax, analítica básica y un electrocardiograma para que el anestesista evalúe el riesgo quirúrgico y de permiso a la cirugía.
En qué consiste la cirugía del dedo en resorte o dedo en gatillo mano
Se realiza un corte de aproximadamente un centímetro y medio a nivel de la articulación metatarsofalángica del dedo afectado en la zona palmar, se secciona esa polea, se comprueba la liberación del tendón. Se sutura la piel, se realiza un vendaje sencillo mano-antebrazo y se da el alta con indicaciones de la analgesia que va a tomar, cuándo hacer las curas (generalmente al segundo día).
Esta cirugía es muy poco dolorosa y tiene una duración de aproximadamente 5 minutos, tras ella, el paciente se va a casa.
Post operatorio de la cirugía del dedo en resorte o dedo en gatillo mano
Es importante que el paciente mueva el dedo tras la misma operación para que el tendón no se vuelva a pegar con la cicatrización, que tardará aproximadamente dos semanas. Durante este periodo la movilización es importante y debe ser a tolerancia.
La cicatriz que se crea en la zona del corte, al principio, es dura y puede incomodar un poco hasta que se remodele.
A partir de las dos semanas, puede hacer su vida normal (no deportiva). Deporte y esfuerzos se podrán realizar, generalmente, a partir del mes.
El paciente volverá a consulta tras un mes para valoración, de ahí, volverá a revisión a los dos meses.
Este tipo de cirugía no va a requerir rehabilitación, normalmente con sus quehaceres diarios se recupera el movimiento.